Diario de una filóloga arrepentida

jueves, mayo 11, 2006

Mi yo adolescente

Cuando yo era una mocosa adolescente, era bastante gilipollas. Como todos, diréis vosotros, pero insisto. No tengo problemas en admitirlo. Hay que saber mirar atrás, apartar un poco la cortina de la nostalgia y ver la realidad. Lo era. El sábado noche, en el momento post-Dani, post-cervezas a un euro, Alba iamsogreat empezó a reflexionar sobre amoríos y, por aquello de la solidaridad femenina, le conté parte vergonzosilla de mis greatest hits sentimentales. En realidad sólo le conté uno, pero fue un caso especialmente sentido y grave.
Él estaba repitiendo cuarto de la ESO. Se pegaba en la discoteca sábado sí, sábado no (en realidad es que estaba castigado a salir sólo un sábado de cada dos, cuando lo conocí… Bueno, un castigo como otro cualquiera). Y era porrero perdido. Vamos, que para tener 16 años, iba sobradito. Diréis vosotras: “Claro, pero estaría bueno y la carne es débil”. Pero tampoco es que fuese Brad Pitt. “Pues menuda joya”, remacharéis. Pues sí.
Anoche, ya aburrida de mirar y remirar el libro de gramática que no soy capaz de estudiar ni para atrás, me dió por echar un vistazo a la página web de aquella discoteca a la que iba en mis años mozos. Me habían dicho que había fotos antiguas. Y, mientras me buscaba a mí misma entre un mar de fotos pequeñajas e imposibles de aumentar, en las que había 10 personas por instantánea, me lo encontré de lleno. Si, lo admito: me entró un ataque de risa recordando mi gran drama culebronesco-adolescente (ríete tú de los Rebelde Guays esos, no sabéis bien cómo era aquello). Me dí cuenta, además, de que lo de mi mal gusto para los hombres y mi tendencia incorregible a lo chungo y a lo macarra viene de muuuuuuuuy atrás, con lo cual le auguro dificil solución. Y les mandé la mini-foto a un par de amigas que habían oído hablar de él (fue un trauma en mi tierna inocencia adolescente- en mis tiempos no estabamos tan… lanzadas como las de ahora). Están, las pobres, aún impresionadas. Ene Punto Erre Punto entendió muchas cosas y, de hecho, se ofreció a buscarme un médico atractivo (porque ella es enfermera, no porque crea que necesito ayuda profesional). Alba iamsogreat, cuando hoy volvió a salir el tema de primeros amores, se ofreció para “presentarme a alguien”. Y eso que ella ni siquiera ha visto la foto. Con oir la descripción general, le bastó.
Posted by la_filologa :: 4:52 p. m. :: 4 Comments:

Postea un comentario o cotillea los de los demás

---------------oOo---------------